HISTORIA Y SUPERSTICIONES
- unblogyunparaguas
- 23 abr 2015
- 2 Min. de lectura

¿Cuantas veces habremos escuchado el “¡NO LO ABRAS DENTRO QUE DA MALA SUERTE!” cuando hacemos el amago de abrir un paraguas dentro de casa o un establecimiento cerrado?
Aunque parezca mentira esta no es la única leyenda que rodea los paraguas. Al igual que no se debe de abrir un paraguas dentro de una casa, tampoco se puede abrir un paraguas en un dia soleado estando a la sombra, ya que simboliza estar doblemente protegido del sol y se consideraba un insulto a los dioses. Si el paraguas se nos cae, traerá una decepción en el plano amoroso o de los negocios, pero si otra persona lo recoge del suelo y nos lo devuelve no tendrá efecto alguno. Tampoco se debe colocar un paraguas sobre la cama ni sobre la mesa ya que espanta la buena suerte, aunque si alguien se olvida el paraguas en algún lugar extraño, es signo de que el destino le tiene reservada alguna sorpresa agradable. Por último, si no queremos espantar a la poca buena suerte que nos quedaría después de todo esto, es conveniente evitar el girar un paraguas abierto en forma de ventilador, ya que el aire que desprende simboliza echar todo lo bueno.
Nadie sabe de donde han podido salir algunas de estas caóticas supersticiones.. Sin embargo, la leyenda de que abrir un paraguas dentro de casa trae mala suerte se remonta al siglo XVII cuanto antiguamente en China los paraguas se utilizaban como para soles. Jonás hanway en uno de sus viajes a la china quedo maravillado con el objeto pensando en lo genial que sería poder llevárselo a Inglaterra para cuando lloviese. Y así lo hizo.
Gracias a este hombre el objeto fue cogiengo popularidad y se hizo presente en todas las clases sociales de Inglaterra, siendo los mas adinerados los que llevaban los paraguas mas sofisticados, mientras que las clases más bajas se conformaban con artefactos rígidos y torpes. Precisamente de aquí viene la superstición de la mala suerte dentro de casa, ya que era precisa cierta habilidad para abrir estos paraguas, por esto y para no mojarse mientras lo abrían, lo hacían dentro de casa. Aquí es donde comenzaron los incidentes con arañazos e incluso las perdidas de algún ojo y de aquí que de boca en boca se fuera profesando que el paraguas era de mal agüero.
Con los años esto ha derivado a que abrir un paraguas dentro de casa traerá con sigo alguna desgracia asociada a la mala suerte que hoy por hoy sigue en activo, haciédonos oir algún grito de vez en cuando para no ternimar de abrir el paraguas dentro de un sitio cerrado.
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